Sí, sí, ya sé que no llevo mucho con vosotros (por cierto, ¿tengo lectores? ¿hay alguien ahí? ¡Eooohhh...!!), pero ya tenemos que enfrentarnos a una despedida...Al menos, durante un tiempo. Me voy. De viaje. Resulta que me han dado una beca en Rumanía, en Transilvania (sí, ya sé que suena a camelo) para una tesis que estoy haciendo sobre el mito del vampiro en la mitología y la cultura. Así que mañana mismo parto para la tierra de Vlad Drakul para realizar mis pesquisas.
Pero no os preocupéis, queridos, vuelvo a Bilbao, capital de la Vía Láctea, en un mes y una semana. ¡Sed buenos! Ah, y por cierto, hoy el Monumento Humano del titular de este post cumple un cuarto de siglo, había que felicitarle al pobre, ¿no?
PD: Si no tuviera que hacer la maleta, escribiría algo sobre el horripilaaanteee suceso que acabo de leer (y que casi supera al de el monstruo de Austria ese que empala hijas y nietos-hijos):
¡Salman Rushdie seduce a la Johansson en el videoclip (¡!) de esta última! No lo repriman: ¡ARGHHH...!
Y luego dicen que el tío no aprovecha que algún cauto pensara en cargárselo por sus Versos Satánicos.
Queridos islamistas, pasad de él: el chico no vale la pena...
¡Hasta la vista!
Ida G.